Ayer recibí un e-mail de una futura mamá soltera (si me está leyendo ella sabe quién es). En él me contaba los miedos que repentinamente le habían entrado y cómo a veces dudaba de su capacidad para ser madre y más aún, madre en solitario. Hoy escribo una carta a todas esas mujeres que ya sea en solitario o en pareja están a punto de convertirse en mamás por primera vez. Esto va para ellas:

«Sé que tienes miedo, y que dudas de si vas a ser capaz. Hay tantas cosas que me gustaría decirte…No te juzgues, ni te culpes, el miedo es normal. Pero lo que viene una vez superado ese miedo es tan maravilloso!

Quiero decirte que cuando tomaste la decisión de tener este bebé, ya fuese por sorpresa, por elección, en pareja, o en solitario, ya demostraste la valentía que tienes. Ya eres una gran madre, aunque aún tu bebé todavía no haya nacido.

El día en el que nazca tu bebé será el principio de una aventura maravillosa. Una aventura que será difícil, no te voy a mentir. Habrá días en los que el cansancio te abrume. Días en los que lo veas todo negro, en los que pienses que no puedes más. Pero te prometo que los días buenos van a superar con creces esos días grises. 

Cuando pienses que no puedes más, cuando te sientas sola, cuando te sientas perdida, mira a ese bebé tan perfecto que has creado. Eres perfecta, eres todo lo que ese bebé necesita. Admira ese milagro al que has traído al mundo, con sus manitas, sus piececitos, su piel rosadita…

Cuando dudes de si lo estás haciendo bien, paráte, respira, y escucha a tu instinto. Será tu gran aliado. Solo tú, y nadie más que tú sabe lo que es mejor para tu bebé. 

Habrá momentos en los que te sientas insegura, acomplejada, o que te quieras un poquito menos que el resto de los días. ¿Crees que estás sola?Te equivocas, todas pasamos por lo mismo y quiero recordarte que todo pasa, que el cuerpo cambia si, pero que también vuelve a su ser poco a poco, que la paciencia es desde luego tu mejor amiga en este camino…

No te sientas culpable por anhelar momentos en solitario sin tu bebé, son de hecho muy necesarios. Tu bebé estará mejor cuidado si tú estás bien. No te martirices por echar de menos de vez en cuando tu vida anterior, todas lo hacemos. Mira esta nueva aventura con perspectiva y verás que con el tiempo recuperarás todas aquellas identidades que tenías antes de ser mamá. Esto solo te hace mejor persona, una persona más humana, y te ayudará a crecer emocionalmente. 

La maternidad te va a llevar tus sentimientos más básicos y extremos, de agotamiento, frustración, incertidumbre…Pero también de felicidad plena, de amor incondicional, de conexión…Aprovecha toda esta montaña rusa de emociones para conectar con tu verdadero yo. 

Pide ayuda siempre que lo necesites, no eres peor madre por ello. La crianza en compañía (ya sea de un familiar, amigos, pareja…), siempre es más llevadera. Rodéate de gente positiva, te hará bien.

Y ante todo disfruta. Te lo van a repetir millones de veces, pero es cierto, el tiempo pasa rapidísimo, y más cuando estás viendo crecer a tu mayor tesoro.

Y recuerda, lo vas a hacer bien. «

¿Cuáles fueron vuestros miedos? ¿Cómo os ha cambiado la maternidad? Contadme vuestras experiencias 🙂